En diciembre de 2005, la revista Soho, como parte de un ejercicio periodístico, le propuso a un grupo de parlamentarios que se sometieran a la prueba del polígrafo, para luego elaborar un artículo. Entre los invitados se encontraban Gina Parody, David Luna, Luis Fernando Velasco y Álvaro Araújo, quienes se encontraban en plena campaña para el Senado de la República.
Y aunque casi todos accedieron a la solicitud, hubo una notoria excepción. El día de la cita, cuando el entonces representante Araújo llegó al sitio acordado se salió de casillas, y, entre sorprendido y molesto, dijo:
—Ajá, esta vaina era en serio…
Y después de agregar que él no se sometería a un polígrafo ni estando loco, se ausentó aduciendo que tenía un viaje urgente y que posteriormente se comunicaría con la revista, cosa que nunca ocurrió.
¿Sabía lo que venía?
En estos casos es que salen a relucir frases como: <>el que nada debe, nada teme <>. Alvaro Araujo sabia lo que se le venia encima y por eso se nego al poligrafo.>>A pesar de que el poligrafo no se toma como factor determinante en un juicio. (al menos eso creo)